Santo Domingo. – A solo cinco días de las elecciones del gremio profesoral, el ministro de Educación, Ángel Hernández, justificó el embargo a las cuentas de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP), una medida que ha generado controversia en el ámbito educativo. El Ministerio de Educación de la República Dominicana (Minerd) emitió este sábado un comunicado en el que aclara que el embargo no tiene motivaciones sindicales ni electorales, sino que responde a la prolongada interrupción de la docencia en varias regiones del país.
La suspensión de las clases, que comenzó en Barahona al inicio del año escolar, ha sido motivo de preocupación para el Minerd, que acusa a una facción minoritaria de la ADP de utilizar los paros como una herramienta para impulsar a sus candidatos en las próximas elecciones sindicales. El ministro Hernández aseguró que estas tácticas afectan directamente el derecho de los estudiantes a una educación continua y de calidad, afirmando que la medida legal busca garantizar el cumplimiento del calendario escolar.
Acusaciones de Tácticas Intimidatorias y Defensa del Derecho a la Educación
En su comunicado, el Minerd denunció que la situación en Barahona ha escalado de manera alarmante, señalando que el principal dirigente de la ADP en esa región ha recurrido a amenazas con armas para coaccionar a otros docentes a unirse a los paros. Esta situación ha creado un ambiente de miedo y tensión dentro de la comunidad educativa, afectando gravemente el desarrollo de las actividades académicas.
"La mayoría de los docentes está comprometida con el bienestar de sus alumnos, pero algunos dirigentes buscan beneficios personales, perjudicando a los más vulnerables", afirmó el ministro Hernández, quien reafirmó el compromiso del Ministerio de Educación de proteger el derecho de los niños y adolescentes a recibir una educación ininterrumpida. Además, enfatizó que no permitirá que grupos anárquicos dentro del gremio sindical pongan en riesgo este derecho fundamental.
El Minerd hizo un llamado a la sociedad dominicana para exigir que los dirigentes sindicales abandonen estas prácticas perjudiciales y se enfoquen en mejorar el sistema educativo en lugar de convertirse en su principal obstáculo. "Es momento de que la educación sea prioridad y no una herramienta de manipulación electoral", concluyó Hernández.
Con este fuerte pronunciamiento, el Ministerio de Educación deja claro que no cederá ante las presiones sindicales que pongan en peligro el acceso de los estudiantes a una educación de calidad, mientras el país observa con atención el desenlace de este conflicto en vísperas de las elecciones de la ADP.
