Bajo el lema «El Jardín Botánico no se toca», decenas de ciudadanos se congregaron este viernes en las afueras del Jardín Botánico Nacional para protestar contra la propuesta de reducir parte del área verde con el fin de ampliar la avenida República de Colombia.
La manifestación surge tras conocerse que el proyecto contempla la mutilación de más de 2,000 metros cuadrados de este emblemático parque natural, lo que ha generado una ola de rechazo entre activistas ambientales, vecinos de la zona y defensores del patrimonio ecológico.
«Están destruyendo uno de los pocos pulmones verdes que le quedan a la ciudad. El Gobierno no sabe lo que está haciendo con estas propuestas», expresó uno de los manifestantes, visiblemente indignado.
Los presentes advirtieron que permitir la intervención del Jardín Botánico podría sentar un precedente peligroso para otras áreas protegidas del país.
Argumentaron que el parque no solo es un refugio de biodiversidad, sino también un espacio esencial para el bienestar ambiental y la salud pública de los capitaleños.
El Jardín Botánico Nacional, fundado en 1976, es considerado uno de los pulmones verdes más importantes de la República Dominicana.
Además de su función ecológica, sirve como espacio de educación, recreación y conservación de especies nativas y endémicas.
Organizaciones ambientalistas han exigido al gobierno revisar el plan de ampliación y buscar alternativas que no impliquen la destrucción de áreas naturales protegidas.