NACIONES UNIDAS.- El secretario general de la ONU, António Guterres, celebró este lunes el acuerdo de alto el fuego entre Camboya y Tailandia como un «paso positivo hacia el fin de las hostilidades actuales y el alivio de las tensiones».
En Malasia, los Gobiernos de ambos países anunciaron este lunes un cese al fuego «inmediato y sin condiciones» desde esta medianoche tras cinco días de enfrentamientos en la frontera que dejaron 35 muertos.
«Un alto el fuego inmediato e incondicional, con efecto desde las 24:00 del 28 de julio (17:OO GMT). Esto es un primer paso vital hacia la desescalada y la restauración de la paz y la seguridad», dijo en su intervención el primer ministro de Malasia, Anwar Ibrahim, junto a los líderes de Camboya y Tailandia.
Guterres instó a que ambos países respeten plenamente el acuerdo y creen un entorno adecuado para abordar cuestiones pendientes desde hace tiempo y, en última instancia, lograr una paz duradera, según comunicó el portavoz adjunto del secretario general, Farhan Haq, en su rueda de prensa diaria.
En este sentido, el secretario general elogió a varios países por sus esfuerzos para alcanzar una resolución pacífica del conflicto, como son Malasia, actual presidente de la Asociación de Naciones de Asia Sudoriental (Asean), Estados Unidos y China.